Consejo

Se cree que ésta técnica fue creada por los sumerios en el siglo 9 antes de Cristo y, dada su increíble complejidad, incluso hay quien dice que fue impartida hacia ellos por una raza superior desconocida (probablemente extraterrestres). Después, aún por razones desconocidas por nosotros, esa técnica fue pasada hacia los persas, quienes la usaron sin hacer ningún cambio mayúsculo.
Sin embargo fueron los egipcios quienes perfeccionaron ésta técnica hasta dejarla prácticamente como la conocemos hoy en día. Se cree que fue el Faraón Radamés III quien la introdujo hacia Europa, extendiéndose rápidamente hasta llegar a las razas nórdicas.
Lo más probable es que hayan sido los Vikingos los que la introdujeron a América muchos años antes del descubrimiento oficial de América. Las Culturas precoloniales norteámericanas la adoptaron inmediatamente y se propagó casi inmediatamente por toda mesoamérica.
Y así, llegó a mi padre y así, ahora yo se las transmito a ustedes:
Cuando se metan a bañar, no se quiten los calzones, déjen que se mojen. Luego, quítenselos y tállenlos ligeramente con el mismo jabón con el que se estan bañando. Enjuáguenlos y cuélguenlos en el tubo de la cortina de baño (o, como hacían los Incas, de la regadera).
Así, al día siguiente, tendran unos calzones limpios y frescos, listos para enfrentar los retos de un nuevo día.
Hagan buen uso de este consejo y compartanlo sólo con personas dignas de él.